El aceite MCT se deriva del aceite de coco, que se compone de un 60 por ciento de triglicéridos de cadena media.
El aceite de coco se extrae de los cocos, pero se puede ver que se diferencia de otros aceites vegetales porque es un sólido blanco a temperatura ambiente. Esto se debe a que se compone principalmente (90%) de grasas saturadas.
Es posible que haya oído que las grasas saturadas son malas para la salud, pero el aceite de coco contiene un tipo especial de grasa saturada.
De hecho, la mayor parte (65%) de la grasa del aceite de coco es una mezcla de diferentes “triglicéridos de cadena media” (MCT). Este no es el mismo tipo de grasa saturada que se encuentra en los lácteos y las carnes convencionales.
Las cadenas de longitud media del aceite de coco se absorben fácilmente y van directamente al hígado donde, a diferencia de otras grasas, se metabolizan (es decir, se convierten) rápidamente en energía como moléculas especiales llamadas "cetonas".
Las cetonas pueden ser un excelente combustible para el cerebro y se ha demostrado que ayudan con varios trastornos cerebrales como el Alzheimer y la epilepsia.
CÓMO LOS MCTS PUEDEN AYUDAR CON LA ENFERMEDAD DE ALZHEIMER
Al coco se le ha llamado un “fortalecedor cognitivo potencial” cuando se trata de la enfermedad de Alzheimer, y todo se debe a esas cetonas.
Básicamente, su cerebro utiliza carbohidratos como combustible principal. Sin embargo, en las personas con Alzheimer, parece haber una capacidad reducida para utilizar carbohidratos en ciertas partes del cerebro. De hecho, este cambio se ha observado en personas antes de que desarrollaran síntomas de Alzheimer, lo que lo hace aún más importante para todos nosotros.
Debido a que las cetonas son uno de los combustibles de “respaldo” del cerebro, los investigadores han estado estudiando el uso de cetonas de los MCT como fuente de energía alternativa para aquellas células cerebrales que funcionan mal.
Además de su papel como combustible cerebral, también se ha demostrado que las cetonas ayudan a proteger las neuronas cerebrales de los efectos negativos del péptido beta-amiloide (el material responsable de formar las placas cerebrales que se encuentran en los pacientes con Alzheimer), que puede comenzar a acumularse en el cerebro. cerebro años antes de que aparezcan los síntomas del Alzheimer.
Para obtener más información sobre este tema, recomiendo encarecidamente el siguiente libro;
¡Detén el Alzheimer ahora! Cómo prevenir y revertir la demencia, el Parkinson, la ELA, la esclerosis múltiple y otros trastornos neurodegenerativos.
por Bruce Fife
(Sí... ese es de hecho el título real. Busque en Google).
