Última noticia: La nicotina del tabaco destruye a los nanobots en las inyecciones

Un nuevo estudio realizado por microscopistas de La Quinta Columna ha demostrado que las "entidades autoensamblables" presentes en los anestésicos de Pfizer, Moderna y, más recientemente, dentales, son "totalmente destruidas" por una mezcla de nicotina derivada de tabaco triturado en agua destilada.

El investigador Rafa Calvin realizó este descubrimiento aislando una muestra de anestésico dental durante 30 días y aplicando posteriormente una mezcla de nicotina obtenida de una solución de 1 gramo de tabaco y 5 cc de agua destilada.

En el video a continuación, se puede observar que, cuando la mezcla de nicotina interactúa con la nanotecnología, las estructuras se desintegran y desaparecen por completo.

La Quinta Columna está probando actualmente esta solución de nicotina en una muestra de una inyección de Pfizer y, de tener éxito, podría sentar las bases de un protocolo de tratamiento para desintoxicar a los humanos de esta tecnología alienígena.

Esto incluiría el uso de nicotina sin aditivos, directamente del tabaco, no de los cigarrillos que se compran en tiendas.

El Dr. Bryan Ardis y otros ya han identificado que la nicotina combate de forma única la infección por covid, protegiendo los receptores, un fenómeno incluso reconocido por los científicos del establishment.

¿Podría la nicotina ser la clave para derrotar a la nanotecnología invasiva?

La nicotina, un potente alcaloide presente principalmente en las plantas de tabaco, se está explorando por su posible impacto en las vacunas basadas en nanotecnología. Como estimulante reconocido, la nicotina actúa imitando los neurotransmisores cerebrales, lo que aumenta el estado de alerta y la concentración.

La investigación sobre el efecto de la nicotina en la nanotecnología aplicada a las vacunas se encuentra en sus primeras etapas conceptuales. Algunos estudios sugieren que la estructura molecular de la nicotina podría influir en la estabilidad y los mecanismos de administración de las vacunas basadas en nanopartículas. Esto podría mejorar la eficacia de las vacunas al garantizar una mayor precisión y una permanencia prolongada en el organismo.

Además, se está investigando la nicotina por su papel en la modulación del sistema inmunitario. Si bien tradicionalmente se ha considerado un inmunosupresor, nuevas investigaciones investigan si su modulación de la respuesta inmunitaria podría ser beneficiosa para optimizar el diseño y la administración de vacunas.

Sin embargo, las propiedades adictivas de la nicotina y sus riesgos para la salud, en particular los relacionados con la salud cardiovascular, presentan desafíos significativos. Estas preocupaciones exigen una cuidadosa consideración de la dosis y los métodos de administración en cualquier posible aplicación.

En el ámbito de la inflamación, la nicotina podría influir en las vías inflamatorias a escala nanométrica. Esta propiedad se está investigando por su posible utilidad para reducir la inflamación relacionada con las vacunas y mejorar la comodidad y el cumplimiento terapéutico del paciente.

La exploración del papel de la nicotina en el tratamiento del cáncer, en particular a través de su interacción con nanopartículas transportadoras de fármacos, también está captando atención. En este sentido, se está evaluando la capacidad de la nicotina para interactuar con receptores celulares específicos por su potencial para aumentar la especificidad y la eficacia de las vacunas contra el cáncer.

Sin embargo, todavía se necesita una investigación exhaustiva, incluidos ensayos clínicos en humanos, para comprender plenamente los efectos de la nicotina en la nanotecnología utilizada en las vacunas y determinar estrategias de aplicación seguras que abarquen sus beneficios sin los riesgos.